La reciente reforma de la Ley Concursal en España ha introducido innovaciones significativas en su Libro II, marcando un hito en el ámbito del derecho de insolvencia. Entre las novedades más destacadas se encuentran los planes de reestructuración y la figura del Experto en reestructuraciones. Este cambio de paradigma brinda mayor flexibilidad y dinamismo a la legislación, proporcionando a las empresas en situación de insolvencia una herramienta esencial para garantizar su continuidad, mejorar el retorno a los acreedores y preservar el tejido empresarial en el país.
Funciones cruciales del Experto en reestructuraciones
La Ley Concursal otorga al Experto en reestructuraciones un papel fundamental, actuando como asesor tanto del deudor como de los acreedores en la elaboración del plan de reestructuración. Además, desempeña una función mediadora para alcanzar la homologación del plan, ya sea propuesto por el deudor o por los acreedores.
La neutralidad es una característica esencial del Experto, nombrado por el Juez a propuesta de cualquiera de las partes involucradas. Su objetivo principal es garantizar el respeto de los derechos tanto de los acreedores como del deudor a lo largo de todo el proceso. Además, el Experto puede ser solicitado por el juez para emitir informes, que van desde la confirmación de clases de acreedores hasta la valoración completa de la compañía.
Importancia de la valoración en el proceso de reestructuración
La tarea más significativa del Experto en reestructuraciones se centra en la valoración de la compañía, especialmente en el contexto de planes de reestructuración no consensuales. El proceso de valoración se realiza bajo el criterio de «empresa en funcionamiento», simulando la cascada de pagos concursales posteriores.
Esta simulación determina qué acreedores estarán «in the money», es decir, recibirán algún importe de la liquidación, y cuáles estarán «out of the money», sin recibir ningún beneficio. La distinción entre estas categorías es crucial, ya que los acreedores «in the money» pueden influir en clases de acreedores disconformes con el plan, incluso forzando la conversión de deuda por capital y adquiriendo acciones de la compañía, transformándose de acreedores a accionistas.
El Experto como clave del proceso
Las responsabilidades encomendadas al Experto en reestructuraciones van más allá de ser un simple asesor o interventor. Su capacidad para validar correctamente el plan de viabilidad y valorar la compañía es esencial para la configuración de las clases de acreedores. Además, su papel es determinante para obtener la aprobación del plan de reestructuración, condición sine qua non para el éxito del proceso.
En conclusión, la introducción de los planes de reestructuración y la figura del Experto en reestructuraciones en la nueva Ley Concursal representa un avance significativo hacia un enfoque más dinámico y flexible en el tratamiento de la insolvencia. La habilidad del Experto para guiar el proceso y validar de manera precisa los planes de reestructuración se erige como un pilar fundamental para la supervivencia y revitalización de las empresas en tiempos de crisis financiera.
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